Permanezca en Jesús
El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden.
Juan 15:6
Si le pidiera que hiciera una lista de cien cosas que necesita realizar para agradar al Señor, usted podría hacerla, ¿cierto? Probablemente estaría pensando en una lista tan larga de qué hacer y qué no hacer, y no sabría por dónde empezar.
Pero puede estar tranquilo. No voy a sugerirle que haga una lista. Al contrario, voy a ayudarle a simplificar las cosas al darle sólo una: Permanezca en Jesús.
De lo único que usted es verdaderamente responsable es de su unión con Él. Si usted mantiene intactas la unión y comunión con Él, todo lo demás estará resuelto.
“Pero, ahora estoy enfrentando algunos problemas grandes. Mi vida está de cabeza. Estoy tan afanado que no sé si voy o vengo. Hoy no tengo tiempo para tener comunión con el Señor”.
¡Es entonces, cuando más necesita tener comunión con Él! Necesita mantener su unión con el Señor, en especial cuando las tormentas de la vida vienen. Sé que eso no siempre es fácil. Ya sea la tormenta una enfermedad en su cuerpo, problemas económicos o contiendas familiares; la tentación será fijar su atención y su mente en ese problema. Ni siquiera querrá pensar en algo más.
Pues, eso fue lo que el diablo planeó. Ésa es la razón por la cual él envió esa tormenta; para distraerlo de la comunión con Dios y para alejar su atención de su unión con Él.
No caiga en la trampa del diablo. En lugar de eso, ponga sus pensamientos y su mirada en el Señor. A medida que lo haga, la fuerza de la fe comenzará a fluir de usted. Esa corriente rechazará toda forma de oscuridad. Usted saldrá victorioso de cada tormenta.
Tenga hoy comunión con Jesucristo.


